El Iberostar Tenerife cayó derrotado este sábado en su visita a un potente Valencia Basket (98-80), que no dio pie a la sorpresa. Un parcial de 16-0 en el tercer cuarto condenó las opciones de un equipo, el tinerfeño, al que no le valió el gran partido de Saúl Blanco (26 de valoración) ni la mejor actuación desde su llegada a España de Mihalis Tsairelis (13+6). La gran variedad de recursos del conjunto taronja, con hasta cinco jugadores en dobles dígitos de valoración y anotación, y su fluidez ofensiva tras el receso (30+28), decantaron la balanza a su favor.

Hasta ahí, el grupo de Alejandro Martínez había dejado sensaciones y argumentos para la esperanza. Sin San Miguel, que finalmente no pudo recuperarse a tiempo del golpe en el talón izquierdo sufrido el martes, el Iberostar Tenerife tiró del colectivo para firmar una buena tarjeta de presentación en La Fonteta, una de las canchas más complicadas de la Liga Endesa. Con los diez jugadores aportando en el rebote, Heras firmando buenos minutos de uno y los canaristas explotando el pase extra, el Valencia no encontró la manera de romper pronto el partido ni acabó de imponer su sello.

Y eso que los de Perasovic afinaron lo suyo desde más allá del 6,75 (6/12 en los dos primeros cuartos) y aprovecharon bien tanto la mejor versión de Loncar en la pintura como la de Vives en las penetraciones. Por ahí, el Valencia se mantenía arriba, pero el buen arranque de Nico Richotti, primero; los buenos minutos saliendo desde el banquillo de Mihalis Tsairelis, después; y, en general, el buen hacer del grupo mantenían a los aurinegros con serias opciones (40-37, 20'), tras dominar el rebote con cierta suficiencia (26 al descanso, con 12 capturas ofensivas).

De hecho, un alley oop de Nico a Sikma nada más arrancar el tercer cuarto barruntaba una batalla interesante, pero en apenas tres minutos, el Valencia le dio un bofetón al partido con un parcial de 16-0. Una acción incomprensible de 3+2 y sendas técnicas a Martínez por protestar y a Sikma por simular sacaron por momentos al Iberostar del partido, lo suficiente al menos para que los taronja castigaran de manera implacable el aro canarista y encarrilaran el triunfo (58-41, 26').

El conjunto insular trató de volver a meterse en partido, pese a que el panorama pintaba feo. Por ahí, apareció la mejor versión de Saúl Blanco (70-57, 30'). Sin embargo, los amagos de reacción visitante tropezaron entonces contra un Valencia más sólido que en el primer acto. Con viento a favor, los de Perasovic amarraron bien el choque, mejoraron en el rebote y jugaron con más confianza en ataque hasta el 98-80 definitivo.

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